Pichicato Ramírez tiene por único interés en la vida: coleccionar todo tipo de objetos inútiles. Cierto día este excéntrico millonario de Olotlán, cegado por su manía de coleccionar objetos raros, hace un pacto terrible para atrapar en una caja la risa de todos los habitantes del pueblo, incluida la de su sobrino Jacinto. Así, mientras Pichicato se luce con su nueva colección de sonrisas en el congreso del Club de Coleccionistas Internacionales, en el pueblo todos están deprimidos, cabizbajos e incapaces de jugar el partido de béisbol tan importante para Jacinto y su equipo. Finalmente, la madre de Pichicato descubre su artimaña y lo obliga a resarcir el daño causado al pueblo y todos vuelven a ser los que eran restableciendo la convivencia en el pueblo.